Ética para Amador es un ensayo publicado por primera vez en abril de 1991 por el escritor y filósofo español Fernando Savater para su hijo Amador. El libro consta de 9 capítulos y trata sobre la ética, moral y filosofía de la vida a través de la historia.El libro está escrito en un lenguaje sencillo y está dirigido al público general, en especial a los jóvenes. Es un libro destinado a hablar de ética a los adolescentes principalmente (también a personas adultas, pero en menor medida) sin caer en una simple narración de una serie de ideas morales, o que parezcan un manual de cómo actuar en situaciones prácticas de la vida. Pero intenta contribuir filosófica y literariamente al planteamiento de esa manera de actuar, que es en el fondo la ética.ación de una serie de ideas morales, o que parezcan un manual de cómo actuar en situaciones prácticas de la vida. Pero intenta contribuir filosófica y literariamente al planteamiento de esa manera de actuar, que es en el fondo la ética.
Literatura Española
viernes, 28 de octubre de 2011
Fernando Savater


Surrealismo
El Surrealismo comienza en 1924 en París con la publicación del "Manifiesto Surrealista" de André Breton, quien estimaba que la situación histórica de posguerra exigía un arte nuevo que indagara en lo más profundo del ser humano para comprender al hombre en su totalidad.
Siendo conocedor de Freud pensó en la posibilidad que ofrecía el psicoanálisis como método de creación artística.
Para los surrealistas la obra nace del automatismo puro, es decir, cualquier forma de expresión en la que la mente no ejerza ningún tipo de control. Intentan plasmar por medio de formas abstractas o figurativas simbólicas las imágenes de la realidad más profunda del ser humano, el subconsciente y el mundo de los sueños. Para lo que utilizan recursos como: animación de lo inanimado, aislamiento de fragmentos anatómicos, elementos incongruentes, metamorfosis, máquinas fantásticas, relaciones entre desnudos y maquinaria, evocación del caos, representación de autómatas, de espasmos y de perspectivas vacías. El pensamiento oculto y prohibido será una fuente de inspiración, en el erotismo descubren realidades oníricas, y el sexo será tratado de forma impúdica.
Se interesaron además por el arte de los pueblos primitivos, el arte de los niños y de los dementes. Preferirán los títulos largos, equívocos, misteriosos, lo que significa que importaba más el asunto que la propia realización.

Siendo conocedor de Freud pensó en la posibilidad que ofrecía el psicoanálisis como método de creación artística.
Para los surrealistas la obra nace del automatismo puro, es decir, cualquier forma de expresión en la que la mente no ejerza ningún tipo de control. Intentan plasmar por medio de formas abstractas o figurativas simbólicas las imágenes de la realidad más profunda del ser humano, el subconsciente y el mundo de los sueños. Para lo que utilizan recursos como: animación de lo inanimado, aislamiento de fragmentos anatómicos, elementos incongruentes, metamorfosis, máquinas fantásticas, relaciones entre desnudos y maquinaria, evocación del caos, representación de autómatas, de espasmos y de perspectivas vacías. El pensamiento oculto y prohibido será una fuente de inspiración, en el erotismo descubren realidades oníricas, y el sexo será tratado de forma impúdica.
Se interesaron además por el arte de los pueblos primitivos, el arte de los niños y de los dementes. Preferirán los títulos largos, equívocos, misteriosos, lo que significa que importaba más el asunto que la propia realización.

Cubismo
George Braque junto con Picasso son los inspiradores del movimiento y algunos de los principales maestros son Juan Gris, Fernand Leger, Jean Metzinger y Albert Gleizes, pero con anterioridad, Cézanne ya habría marcado el camino.

Estas lecciones fueron asumidas por el cubismo que hará un replanteamiento de la obra de arte, de las formas, de la perspectiva, el movimiento, el volumen, el espacio, el color, etc. Crea un nuevo lenguaje pictórico y estético que implica una nueva relación entre el espectador y la obra de arte. El espectador ya no puede contemplarla sin más, sino que tiene que reconstruirla en su mente para poder comprenderla.
El Cubismo es un arte mental, se desliga completamente de la interpretación o semejanza con la naturaleza, la obra de arte tiene valor en sí misma, como medio de expresión de ideas. La desvinculación con la naturaleza se consigue a través de la descomposición de la figura en sus partes mínimas, en planos, que serán estudiados en sí mismos y no en la visión global de volumen. Así un objeto puede ser visto desde diferentes puntos de vista, rompiendo con la perspectiva convencional y con la línea de contorno. Desaparecerán las gradaciones de luz y sombra y no se utilizarán los colores de la realidad, apareciendo en las representaciones el blanco y negro. Las formas geométricas invaden las composiciones. Las formas que se observan en la naturaleza se traducirán al lienzo de forma simplificada, en cubos, cilindros, esferas. Nunca cruzaron el umbral de lo abstracto, la forma siempre fue respetada.
Los principales temas serán los retratos y las naturalezas muertas urbanas.

Expresionismo
El Expresionismo es una corriente artística que busca la expresión de los sentimientos y las emociones del autor más que la representación de la realidad objetiva.
Revela el lado pesimista de la vida generado por las circunstancias históricas del momento. La cara oculta de la modernización, la alineación, el aislamiento, la masificación, se hizo patente en las grandes ciudades y los artistas, creyeron que debían captar los sentimientos más íntimos del ser humano. La angustia existencial es el principal motor de su estética.
Hay una serie de movimientos de vanguardia que se pueden agrupar bajo el título común de expresionismo. Se trata de un arte que no quiere partir del mundo exterior para estudiarlo, conocerlo o representarlo, sino que pretende expresar el mundo interior, la esfera emotiva o espiritual del artista.
Orígenes del expresionismo
El expresionismo aglutina experiencias diversas, de la literatura a la música, pasando por las artes figurativas, y también expresiones artísticas nuevas como el cine.
Los precedentes se deben buscar en artistas que ya habían manifestado el malestar o angustia por pertenecer a una sociedad que consideraban en crisis, tales como Van Gogh, Gauguin y Novell. O en esos otros que habían resuelto ese mismo malestar con la armonía decorativa y el gusto cromático, como Matisse y los fauvistas.
Los dos grandes referentes
El ámbito más adecuado para el desarrollo de las tendencias expresionistas es el de la cultura alemana, a causa de las características espirituales, y a veces místicas, del romanticismo alemán. Pero los dos grandes puntos de referencia para los expresionistas son Edvard Munich y James Ensor.
La pintura del noruego Edgard Munch (1863-1944), que pasó muchas temporadas en Francia, Italia y Alemania, es una pintura trágica que expresa el sentimiento terrible de la soledad y la muerte. Para ello usa composiciones en las que el color violento se dispone dentro de líneas sinuosas.
El belga James Ensor (1860-1949) destacó por la originalidad de su obra. Sobretodo por sus retratos, que ofrecen una visión grotesca de la humanidad y que le convirtieron en el principal precursor del expresionismo. Sus colores fuertes y estridentes, así como sus pinceladas violentas y bruscas potenciaban el efecto agresivo de sus temas.
La pintura expresionista
El expresionismo en pintura toma forma el año 1905 en Dresden, donde se reúne un grupo de artistas que bautizan a su movimiento con el nombre de Die Brücke (“El puente”). Entre ellos hay Ernst Ludwig Kirchner (1880-1938) y Kart Schmidt-Rottluff (1884-1976). Después se unieron otros como Emil Nolde (1867-1956). Todos tienen en común el uso de colores fuertes, violentos y contrastados, mientras el dibujo deforma las imágenes en un sentido visionario o caricaturesco. El grupo se trasladó a Berlín en 1911 y se disolvió 2 años después, a causa de fuertes diferencias internas.
Mientras, en Munich, se formó otro grupo, la Neue Künstlervereinigung (“Nueva asociación de artistas”) y después, en 1911 Der Blaue Reiter (“El caballero azul”), en el cual convergen también algunos pintores de Die Brücke. Sus fundadores son Vasilig Kandinsky (1866-1944) y Franz Marc (1880-1916), que en 1912 publican el almanaque “Der Blaue Reiter”, donde se recoge un conjunto de escritos teóricos básicos para la compresión de las ideas del movimiento. Este arte tiene un significado espiritual. Todos ellos definen la posibilidad de crear una pintura que no represente, sino que exprese a través de la armonía de líneas y de colores.
Otros artistas alemanes como Otto Dix (1891-1969) y George Grosz (1893-1959), siguen el camino del expresionismo de base realista, violento y grotesco, con acentuación de la sátira política y social, y de la denuncia de los males de la sociedad contemporánea. hasta el punto que con el nazismo se ven obligados a irse de Alemania.
El fin es potenciar el impacto emocional del espectador distorsionando y exagerando los temas. Representan las emociones sin preocuparse de la realidad externa, sino de la naturaleza interna y de las impresiones que despierta en el observador. La fuerza psicológica y expresiva se plasma a través de los colores fuertes y puros, las formas retorcidas y la composición agresiva. No importa ni la luz ni la perspectiva, que se altera intencionadamente. La obra de arte expresionista presenta una escena dramática, una tragedia interior. De aquí que los personajes que aparecen más que seres humanos concretos reproduzcan tipos. El primitivismo de las esculturas y máscaras de África y Oceanía también supuso para los artistas una gran fuente de inspiración
Revela el lado pesimista de la vida generado por las circunstancias históricas del momento. La cara oculta de la modernización, la alineación, el aislamiento, la masificación, se hizo patente en las grandes ciudades y los artistas, creyeron que debían captar los sentimientos más íntimos del ser humano. La angustia existencial es el principal motor de su estética.

Orígenes del expresionismo
El expresionismo aglutina experiencias diversas, de la literatura a la música, pasando por las artes figurativas, y también expresiones artísticas nuevas como el cine.
Los precedentes se deben buscar en artistas que ya habían manifestado el malestar o angustia por pertenecer a una sociedad que consideraban en crisis, tales como Van Gogh, Gauguin y Novell. O en esos otros que habían resuelto ese mismo malestar con la armonía decorativa y el gusto cromático, como Matisse y los fauvistas.
Los dos grandes referentes
El ámbito más adecuado para el desarrollo de las tendencias expresionistas es el de la cultura alemana, a causa de las características espirituales, y a veces místicas, del romanticismo alemán. Pero los dos grandes puntos de referencia para los expresionistas son Edvard Munich y James Ensor.
La pintura del noruego Edgard Munch (1863-1944), que pasó muchas temporadas en Francia, Italia y Alemania, es una pintura trágica que expresa el sentimiento terrible de la soledad y la muerte. Para ello usa composiciones en las que el color violento se dispone dentro de líneas sinuosas.
El belga James Ensor (1860-1949) destacó por la originalidad de su obra. Sobretodo por sus retratos, que ofrecen una visión grotesca de la humanidad y que le convirtieron en el principal precursor del expresionismo. Sus colores fuertes y estridentes, así como sus pinceladas violentas y bruscas potenciaban el efecto agresivo de sus temas.
La pintura expresionista
El expresionismo en pintura toma forma el año 1905 en Dresden, donde se reúne un grupo de artistas que bautizan a su movimiento con el nombre de Die Brücke (“El puente”). Entre ellos hay Ernst Ludwig Kirchner (1880-1938) y Kart Schmidt-Rottluff (1884-1976). Después se unieron otros como Emil Nolde (1867-1956). Todos tienen en común el uso de colores fuertes, violentos y contrastados, mientras el dibujo deforma las imágenes en un sentido visionario o caricaturesco. El grupo se trasladó a Berlín en 1911 y se disolvió 2 años después, a causa de fuertes diferencias internas.
Mientras, en Munich, se formó otro grupo, la Neue Künstlervereinigung (“Nueva asociación de artistas”) y después, en 1911 Der Blaue Reiter (“El caballero azul”), en el cual convergen también algunos pintores de Die Brücke. Sus fundadores son Vasilig Kandinsky (1866-1944) y Franz Marc (1880-1916), que en 1912 publican el almanaque “Der Blaue Reiter”, donde se recoge un conjunto de escritos teóricos básicos para la compresión de las ideas del movimiento. Este arte tiene un significado espiritual. Todos ellos definen la posibilidad de crear una pintura que no represente, sino que exprese a través de la armonía de líneas y de colores.
Otros artistas alemanes como Otto Dix (1891-1969) y George Grosz (1893-1959), siguen el camino del expresionismo de base realista, violento y grotesco, con acentuación de la sátira política y social, y de la denuncia de los males de la sociedad contemporánea. hasta el punto que con el nazismo se ven obligados a irse de Alemania.
El fin es potenciar el impacto emocional del espectador distorsionando y exagerando los temas. Representan las emociones sin preocuparse de la realidad externa, sino de la naturaleza interna y de las impresiones que despierta en el observador. La fuerza psicológica y expresiva se plasma a través de los colores fuertes y puros, las formas retorcidas y la composición agresiva. No importa ni la luz ni la perspectiva, que se altera intencionadamente. La obra de arte expresionista presenta una escena dramática, una tragedia interior. De aquí que los personajes que aparecen más que seres humanos concretos reproduzcan tipos. El primitivismo de las esculturas y máscaras de África y Oceanía también supuso para los artistas una gran fuente de inspiración
Impresionismo
El Impresionismo es un movimiento pictórico que surge en Francia a finales del S. XIX en contra de las fórmulas artísticas impuestas por la Academia Francesa de Bellas Artes, que fijaba los modelos a seguir y patrocinaba las exposiciones oficiales en el Salón parisino.
El objetivo de los impresionistas era conseguir una representación del mundo espontánea y directa.
El Impresionismo parten del análisis de la realidad. Hasta ahora la pintura reproducía un escenario en el que ocurría un acontecimiento que conformaba el mensaje para el espectador. Ahora, se quiere que la obra reproduzca la percepción visual del autor en un momento determinado, la luz y el color real que emana de la naturaleza en el instante en el que el artista lo contempla. Se centrarán en los efectos que produce la luz natural sobre los objetos y no en la representación exacta de sus formas ya que la luz tiende a difuminar los contornos. Ven colores que conforman cosas, y esto es lo que plasman, formas compuestas por colores que varían en función de las condiciones atmosféricas y de la intensidad de la luz. Todo esto hace que elaboren una serie de un mismo objeto en diferentes circunstancias atmosféricas y temporales, no les importa el objeto, sino las variaciones cromáticas que sufre éste a lo largo del día.
Los impresionistas eliminaron los detalles minuciosos y tan sólo sugirieron las formas, empleando para ello los colores primarios (azul, rojo y amarillo) y los complementarios (naranja, verde y violeta). Consiguieron ofrecer una ilusión de la realidad aplicando directamente sobre el lienzo pinceladas de color cortas y yuxtapuestas.
Aunque los hallazgos del impresionismo francés resultaron decisivos para la pintura del S. XX, conceptos como los de luz y color se encontraban ya en la pintura veneciana de mediados del S. XVI. Efectos que también están presentes en obras realizadas por Hals, Velázquez y Goya. Los antecedentes inmediatos los encontramos en los pintores como John Constable, Turner, Corot y en la escuela de Barbizón, con su aportación de la pintura al aire libre.
El término impresionistas les fue impuesto de modo peyorativo por el crítico Louis Leroy al ver la obra de Monet Impresión atardecer o Impresión sol naciente en la exposición de 1874. Lo habitual era exponer en el Salón Oficial, pero los nuevos artistas, conocidos como "Los Rechazados", tenían que buscar lugares alternativos donde les permitieran exhibir sus obras.
Así, la primera exposición impresionista tuvo lugar el 15 de Abril de 1874 en el Salón del fotógrafo Nadar. Las figuras principales del movimiento fueron Eduard Manet, Degas, Claude Monet, Auguste Renoir, Morisot, Pisarro y Sisley.

El Impresionismo parten del análisis de la realidad. Hasta ahora la pintura reproducía un escenario en el que ocurría un acontecimiento que conformaba el mensaje para el espectador. Ahora, se quiere que la obra reproduzca la percepción visual del autor en un momento determinado, la luz y el color real que emana de la naturaleza en el instante en el que el artista lo contempla. Se centrarán en los efectos que produce la luz natural sobre los objetos y no en la representación exacta de sus formas ya que la luz tiende a difuminar los contornos. Ven colores que conforman cosas, y esto es lo que plasman, formas compuestas por colores que varían en función de las condiciones atmosféricas y de la intensidad de la luz. Todo esto hace que elaboren una serie de un mismo objeto en diferentes circunstancias atmosféricas y temporales, no les importa el objeto, sino las variaciones cromáticas que sufre éste a lo largo del día.

Aunque los hallazgos del impresionismo francés resultaron decisivos para la pintura del S. XX, conceptos como los de luz y color se encontraban ya en la pintura veneciana de mediados del S. XVI. Efectos que también están presentes en obras realizadas por Hals, Velázquez y Goya. Los antecedentes inmediatos los encontramos en los pintores como John Constable, Turner, Corot y en la escuela de Barbizón, con su aportación de la pintura al aire libre.
El término impresionistas les fue impuesto de modo peyorativo por el crítico Louis Leroy al ver la obra de Monet Impresión atardecer o Impresión sol naciente en la exposición de 1874. Lo habitual era exponer en el Salón Oficial, pero los nuevos artistas, conocidos como "Los Rechazados", tenían que buscar lugares alternativos donde les permitieran exhibir sus obras.
Así, la primera exposición impresionista tuvo lugar el 15 de Abril de 1874 en el Salón del fotógrafo Nadar. Las figuras principales del movimiento fueron Eduard Manet, Degas, Claude Monet, Auguste Renoir, Morisot, Pisarro y Sisley.
Dadaismo
El movimiento Dada surgió a la vez en Suiza y Estados Unidos en 1916. Desde Zurich se expandió hacia Alemania y hacia Francia. En París es ya el movimiento de moda en 1923. El movimiento Dada tiene la particularidad de no ser un movimiento de rebeldía contra otra escuela anterior, sino que se funda en un cuestionamiento de todo el marco conceptual del arte y de la literatura de antes de la Primera Guerra.
Durante una reunión en el café Cabaret Voltaire de Zurich, Suiza (1916), un grupo de jóvenes intelectuales, inconformistas, contrarios a la primera guerra mundial decide construir un movimiento artístico y literario completamente revolucionario.
Lo denominaron dadaísmo, proviene del término "dada" que significa en francés "caballito de juguete". El movimiento se desarrolla en Europa y en los Estados Unidos en la segunda década del sigo XX. y defiende la libertad del hombre, la espontaneidad y la destrucción. Su propósito se opone a los conceptos tradicionales del arte y a una ideología burguesa.
El grupo esta compuesto por el pintor y escultor Hans Arp, los escritores alemanes Ball y Hulsenbeck, el poeta Rumano Tzara, autor del manifiesto Dada de 1918, y algunos otros artistas plásticos como también el rumano Janco, entre otros. Sin embargo el movimiento tiene un antecesor, el francés Duchamp, quien en 1913 presenta su "Rueda de Bicicleta", que supone el inicio de la desmitificación de la obra artística.
La Novia por Marcel Duchamp El dadaismo obtuvo su nombre al azar. Empezó entre la década de 1940 y 1950. Estos pintores utilizan figuras amorfas. Además, usan mucho el simbolismo. Estas obras no tienen explicación por sí mismas, sin la ayuda del autor. Utilizan colores lisos, pero s ordos.
El dadaismo empezó solo siendo un movimientos literario. A consecuencia de esto, la tendencia que predomina es la de otorgar nuevos significados a las imágenes que representan cosas. No adoptaron la postura del que rechaza todo tipo de valor a una obra d e arte cuando la encuentra literaria. En las pinturas se advierte un afán de no-estilo, una voluntad de antiforma que procede de la intención manifiesta de agrupar a todos los que se sientan disconformes con el mundo ordenado, no que los que propongan imp onerle una nueva norma. Acoge artistas que solo pueden ser considerados en franca rebeldía, y admite formas que hasta cierto punto contradicen los postulados de destrucción que lo guían.
El dadaismo surge como el producto de la desilusión de la Primera Guerra Mundial, de la derrota y de la carnicería tan espantosa que hubo. Pensaban que la civilización que había producido esos horrores debía ser barrida y comenzar otra nueva. Es un movimi ento nihilista que desconfía del orden y de la razón. Produjo un "antiarte" basado en cosas carentes de sentido, en aras del absurdo humor amargo. Los integrantes del dadaismo innovaron el empleo original de papier collé, que derivó hacia el collage y el fotomontaje. Para los dadaistas, el uso del collage consistió en la agrupación dinámica de fragmentos de imágenes en la que aparecen por obra del a zar nuevas estructuras, cuyo sentido estético no procede de la suma de los componentes, sino del espíritu de totalidad que se logra con ella. Cada fragmento tiene un valor formal, y un valor de contenido propio, y el collage se transforma en un dinámico y absurdo juego de imágenes fragmentadas que revelan metáforas inesperadas. Así, el collage se vuelve un método de exploración de la realidad y un procedimientos para expresarla que explica la inmediata influencia que tuvo sobre aquellas formas modernas qu e requieren un dinamismo más acentuado que la pintura.
También se valieron de objetos hechos de carácter comercial, a los que desplazaba de su función original modificándolos o agregándoles formas extrañas como si los hubiese guiado la idea de que una surrealidad se esconde tras las cosas más comunes que nos rodean. Los dadaistas pensaban que no hace falta llegar a la creación absoluta para trascender, y que basta descubrir el modo de hacerlo entre los objetos, como algo que presta sentido a lo común y trivial. Tendían a restar importancia al valor espiritual de cada objeto para otorgárselo al conjunto.

Paisaje Dadá por Giulio Evola
El Dadaísmo nació en Alemania y Suiza durante la Primera Guerra Mundial, y despúes de la conflagración se trasladó a París. No era tanto un movimiento artístico como una actitud, una actitud de revuelta y de desprecio, de disgusto frente al orden social existente, caracterizado por una avaricia inhumana y un ansia de poder, y frente al arte tradicional, que había quedado invalidado por el hecho de que la sociedad lo consideró respetable. El bigote y la inscripción obscena en la "Mona Lisa" ilustra perfectamente esta actitud. Los Dadaístas experimentaron diversos estilos artísticos, algunos de los cuales serían desarrollados posteriormente por los Surrealistas. En el período de entreguerras, el Surrealismo (asentado en París y altamente cosmopolita) dominó el mundo del arte y jugó un papel importante en la literatura y en el cine. A partir de mediados de los años 40, muchos de sus reclutas más relevantes vinieron de América
Dadaísmo
Durante una reunión en el café Cabaret Voltaire de Zurich, Suiza (1916), un grupo de jóvenes intelectuales, inconformistas, contrarios a la primera guerra mundial decide construir un movimiento artístico y literario completamente revolucionario.
Lo denominaron dadaísmo, proviene del término "dada" que significa en francés "caballito de juguete". El movimiento se desarrolla en Europa y en los Estados Unidos en la segunda década del sigo XX. y defiende la libertad del hombre, la espontaneidad y la destrucción. Su propósito se opone a los conceptos tradicionales del arte y a una ideología burguesa.
El grupo esta compuesto por el pintor y escultor Hans Arp, los escritores alemanes Ball y Hulsenbeck, el poeta Rumano Tzara, autor del manifiesto Dada de 1918, y algunos otros artistas plásticos como también el rumano Janco, entre otros. Sin embargo el movimiento tiene un antecesor, el francés Duchamp, quien en 1913 presenta su "Rueda de Bicicleta", que supone el inicio de la desmitificación de la obra artística.
Estilo postmoderno
Este estilo tiene un doble código. Por un lado, se mantiene vinculado al estil racionalista y acepta algunas posiciones del tardomoderno para comunicarse con una élite cultural; por otro lado, intenta comunicarse con el público en general y que éste lo acepte. La posición postmoderna es atractiva porque, intentando ser aceptada, llega a alcanzar unos resultados sorprendentes y espectaculares. Entre los arquitectos más representativos de este estilo están: Michael Graves, Robert Venturi y Ricardo Bofill.
Dadaismo
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La Novia por Marcel Duchamp
El dadaismo empezó solo siendo un movimientos literario. A consecuencia de esto, la tendencia que predomina es la de otorgar nuevos significados a las imágenes que representan cosas. No adoptaron la postura del que rechaza todo tipo de valor a una obra d e arte cuando la encuentra literaria. En las pinturas se advierte un afán de no-estilo, una voluntad de antiforma que procede de la intención manifiesta de agrupar a todos los que se sientan disconformes con el mundo ordenado, no que los que propongan imp onerle una nueva norma. Acoge artistas que solo pueden ser considerados en franca rebeldía, y admite formas que hasta cierto punto contradicen los postulados de destrucción que lo guían.
El dadaismo surge como el producto de la desilusión de la Primera Guerra Mundial, de la derrota y de la carnicería tan espantosa que hubo. Pensaban que la civilización que había producido esos horrores debía ser barrida y comenzar otra nueva. Es un movimi ento nihilista que desconfía del orden y de la razón. Produjo un "antiarte" basado en cosas carentes de sentido, en aras del absurdo humor amargo. Los integrantes del dadaismo innovaron el empleo original de papier collé, que derivó hacia el collage y el fotomontaje. Para los dadaistas, el uso del collage consistió en la agrupación dinámica de fragmentos de imágenes en la que aparecen por obra del a zar nuevas estructuras, cuyo sentido estético no procede de la suma de los componentes, sino del espíritu de totalidad que se logra con ella. Cada fragmento tiene un valor formal, y un valor de contenido propio, y el collage se transforma en un dinámico y absurdo juego de imágenes fragmentadas que revelan metáforas inesperadas. Así, el collage se vuelve un método de exploración de la realidad y un procedimientos para expresarla que explica la inmediata influencia que tuvo sobre aquellas formas modernas qu e requieren un dinamismo más acentuado que la pintura.
También se valieron de objetos hechos de carácter comercial, a los que desplazaba de su función original modificándolos o agregándoles formas extrañas como si los hubiese guiado la idea de que una surrealidad se esconde tras las cosas más comunes que nos rodean. Los dadaistas pensaban que no hace falta llegar a la creación absoluta para trascender, y que basta descubrir el modo de hacerlo entre los objetos, como algo que presta sentido a lo común y trivial. Tendían a restar importancia al valor espiritual de cada objeto para otorgárselo al conjunto.

Paisaje Dadá por Giulio Evola
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